Blogia
LA VERDAD RESTAURADA

Charlas fogoneras

DEVOCIONAL SEI ELDER B.K. PACKER

CHARLA FOGONERA SEI APOSTOL L. TOM PERRY

Recordamos dar pausa a reproductor de musica .

CHARLA FOGONERA SEI Élder Christofferson

CHARLAS FOGONERAS SEI 2008

CHARLAS FOGONERAS SEI 2008

LAS VERDADES SENCILLAS DEL CIELO: LA NORMA DEL SEÑOR
Élder Earl C. Tingey
CÓMO ABRIR LA PUERTA A LAS BENDICIONES DE ABRAHAM
Hermana Julie B. Beck
EL PODER Y LA PROTECCIÓN QUE BRINDA LA MÚSICA INSPIRADORA
Élder Russell M. Nelson
LAS ENSEÑANZAS DE LA CÁRCEL DE LIBERTY
Élder Jeffrey R. Holland
¿QUÉ CLASE DE HOMBRES Y MUJERESHABÉIS DE SER?
Obispo H. David Burton

Descargar Charla SEI 2008

Charla fogonera SEI Elder M. Russell Ballard para jóvenes adultos :

CHARLAS FOGONESRAS SEI 2006

CHARLAS FOGONESRAS SEI 2006

RESISTAN TODA TENTACIÓN DEL DIABLO - Élder W. Rolfe Kerr

MIREMOS HACIA ADELANTE CON LA MIRA DE LA FE - Élder Merrill J. Bateman

COMIENZOS - Presidente James E. Faust

DONES DEL ESPÍRITU PARA TIEMPOS DIFÍCILES - Élder Henry B. Eyring

FE Y OBRAS EN UN MUNDO SECULAR - Obispo Keith B. McMullin

DESCARGAR 2006

CHARLAS FOGONERAS SEI 2005

CHARLAS FOGONERAS SEI 2005

LA FE Y LAS FAMILIAS - Élder Russell M. Nelson

LA BENDICIÓN DEL TRABAJO - Élder David E. Sorensen

LA DEDICACIÓN DE TODA UNA VIDA - Élder Dallin H. Oaks

LAS ESCRITURAS:

DESEABLES MÁS QUE EL ORO; Y DULCES MÁS QUE MIEL - Susan W. Tanner

LAS DECISIONES DETERMINAN NUESTRO DESTINO - Presidente Thomas S. Monson

DESCARGAR 2005

CHARLA FOGONERA ADULTOS SOLTEROS ELDER Richard G. Scott

VER CHARLA FOGONERA EN LDS.ORG

NO TE OLVIDES DE DAR PAUSA A REPRODUCTOR DE MUSICA

CHARLA FOGONERA SEI-ELDER DAVID BURTON

CHARLA FOGONERA SEI-ELDER DAVID BURTON

VER CHARLA FOGONERA ELDER BURTON 02 MAYO

CHARLA FOGONERA : Elder Ronald A. Rasband

CHARLA FOGONERA : Elder Ronald A. Rasband

CHARLA FOGONERA 07 MARZO 2010

PECADOS, CRÍMENES Y EXPIACIÓN.

PECADOS, CRÍMENES Y EXPIACIÓN.

Mis queridos hermanos y hermanas, estoy agradecido por esta oportunidad de hablar a los hombres y mujeres que han sido llamados para enseñar el evangelio de Jesucristo a los jóvenes en nuestras escuelas secundarias, colegios y universidades. La suya es una responsabilidad sagrada. Ustedes son los guardianes de la verdad y los beneficiarios de la confianza de sus estudiantes. Ellos los ven a ustedes como las personas encargadas de llevarles un plan de estudios sagrado. Su tarea es santa y su rendimiento es, por tanto, objeto de grandes expectativas. Sus enseñanzas son, potencialmente, las más importantes que sus estudiantes recibirán. Todos los que hemos sido llamados o asignados como profesores de religión tenemos la seria y sagrada responsabilidad de tratar de ser nosotros mismos y de hacer nuestro desempeño digno del gran mensaje que tenemos. Que Dios nos bendiga al esforzamos por hacerlo!

Después de que Enós clamó al Señor en poderosa oración todo el día y toda la noche, una voz vino a él diciendo: “Enós, tus pecados te son perdonados, y serás bendecido” (Enos 1:5). Sabiendo que Dios no puede mentir, Enós entendió que su culpabilidad fue borrada. Entonces, hace la pregunta que provee el texto de mis observaciones: “Señor, ¿cómo se lleva esto a efecto?” (v. 7).

Se lleva a cabo a causa de la expiación y su fe en el Redentor que ha pagado el precio (ver v. 8). Por una expiación que es milagrosa y va más allá de nuestra comprensión, el sacrificio vicario del Cordero sin mancha que satisface la justicia de Dios. De esta manera, recibimos la misericordia de Dios.

Pero, ¿qué es la justicia? Y ¿que es la misericordia? Y ¿cómo se relacionan entre sí? Estos conceptos son fundamentales para el Evangelio de Jesucristo. Son a veces malentendidos porque se confunden fácilmente al compararlos con los conceptos que entendemos en nuestra mortal preocupación de lo que llamamos la ley penal. De hecho, nuestras ideas sobre la justicia y la misericordia y las leyes de Dios son a veces confusas por lo que sabemos acerca de la justicia penal según lo especificado por las leyes del hombre.

Los jóvenes que ustedes enseñan son susceptibles a estos malentendidos. Por lo tanto, he optado por hablar de la justicia y la misericordia y la expiación, y sobre el arrepentimiento, confesión, y el sufrimiento. Voy a comparar y contrastar cómo se relacionan estas realidades con el contenido y la aplicación de las leyes de Dios y las leyes del hombre. Espero que les ayuden a comprender a sus alumnos estos importantes temas y aplicarlos en sus propias vidas.

 

La Justicia y la Misericordia y la Expiación

 

La justicia tiene muchos significados. Uno es el equilibrio. Un símbolo popular de la justicia es el equilibrio en la balanza. Así, cuando las leyes del hombre han sido violadas, la justicia por lo general requiere que se imponga un castigo, una sanción que permita restaurar el equilibrio.

Generalmente, la gente siente que se ha hecho justicia cuando un delincuente recibe lo que merece cuando el castigo va de acuerdo con el delito cometido. La declaración de creencias de nuestra iglesia señala que “la comisión de crímenes debe castigarse (en virtud de las leyes de los hombres) de acuerdo con la naturaleza de la ofensa;” (D&C 134:8). La preocupación primordial de la ley humana es la justicia.

A diferencia de las cambiantes leyes de los hombres, las leyes de Dios son fijas y permanentes, ” irrevocablemente decretada en el cielo antes de la fundación de este mundo,” (D&C 130:20).

Estas leyes de Dios son también afectadas por la justicia. La idea de que el pago de lo que uno merece es la justicia, es la premisa fundamental de todas las Escrituras que hablan de que los hombres serán juzgados según sus obras. Alma declaró que “es indispensable en la ajusticia de Dios que los hombres sean juzgados según sus cobras;” (Alma 41:3). El Salvador dijo a los nefitas que todos los hombres debían ser levantados ante él “para ser juzgados por sus obras, ya fueren buenas o malas; ” (3 Nefi 27:14). En su carta a los Romanos, Pablo describe “el justo juicio de Dios” en términos de ” apagará a cada uno conforme a sus obras” (Romanos 2:5–6).

De acuerdo con la ley eterna, las consecuencias que se derivan de la justicia de Dios son graves y permanentes. Cuando se rompe un mandamiento, una pena proporcional debe ser impuesta. Esto sucede automáticamente. Las penas previstas por la legislación del hombre sólo siguen la acción del juez, pero en virtud de las leyes de Dios las consecuencias del pecado y las penas son inherentes al acto. “Mas se ha dado una ley, y se ha fijado un castigo,” enseñó el profeta Alma, y “la justicia reclama al ser humano y ejecuta la ley, y la ley impone el castigo;” (Alma 42:22). “Y así vemos” Alma explicó, “que toda la humanidad se hallaba caída, y que estaba en manos de la justicia; sí, la justicia de Dios que los sometía para siempre a estar separados de su presencia” (v. 14). Abinadí enseñó que el Señor mismo “no puede contradecirse a sí mismo; pues no puede negar a la ajusticia cuando ésta reclama lo suyo.” (Mosiah 15:27). Por sí sola, la justicia es inflexible. La justicia de Dios nos hace a cada uno de nosotros responsables de nuestras propias transgresiones y automáticamente impone la sanción. Esta realidad debe impregnar nuestra comprensión, y debe influir en todas nuestras enseñanzas acerca de los mandamientos de Dios y el efecto de nuestras transgresiones.

De acuerdo con la tradición jurídica del hombre, muchos parecen querer la justicia. Es cierto que la justicia es un amigo que nos protegerá de la persecución de los enemigos de la justicia. Pero la justicia también verá que recibamos lo que merecemos, y temo que no es el resultado que esperamos. No puedo lograr mis metas eternas sobre la base de lo que merezco. A pesar de que lo intente con todas mis fuerzas, por eso el Rey Benjamín nos llamó “servidores inútiles ” (véase Mosiah 2:21). Para lograr mis objetivos eternos, necesito más de lo que merezco. Necesito algo más que sólo justicia. DESCARGAR Y SEGUIR LEYENDO

Debemos ser Capitanes

Debemos ser Capitanes

Ustedes y yo tenemos un destino espiritual y no nos permite sentarnos pasivamente en la parte de atrás del avión que viaja por la vida terrenal.

Deben ser capitanes en la causa del Señor con una misión específica que cumplir. El Señor le prometió Abraham que por su descendencia serian bendecidas todas las familias de la tierra, se refería a la bendición espiritual que el mundo recibiría por medio de nosotros a quienes llamo hijos del convenio, Alma describe algunos como llamados y preparados desde la fundación del mundo de acuerdo con la presciencia de Dios se han preguntado alguna vez ¿Por qué soy, quien soy? ¿Porque siento lo que siento? ¿Por qué he decidido creer más plenamente en el Señor Jesucristo? ¿Por qué escojo guardar sus mandamientos, cuando a otros no les importa? ¿Por qué tengo esos sentimientos hacia el Libro de Mormón? ¿Por qué salta las palabras de las escrituras y penetran en mi corazón, cuando otras personas son casi indiferentes a este libro sagrado? ¿Por qué he estado dispuesto hacer convenios sagrados por medio del bautismo, en el templo y para muchos de ustedes servir en una misión? Ustedes fueron escogidos y preordenados a tener el evangelio en su vida y ser líderes en la causa del evangelio restaurado … acepten que tienen un destino eternamente importante un destino espiritual, lean su bendición patriarcal, como se dijo de la reina Esther en la antigüedad ¡para esta hora tu has llegado al reino! Crean en su destino y acéptelo con entusiasmo, el darse cuenta de quienes son, y quienes deben ser, no los conviertes en capitanes en la causa del Señor, hay obstáculos y tentaciones mucho más peligrosos que una manada enorme de gansos canadienses que pueden evitar que logren su destino, deben de estar en guardia, para ser capitanes en la causa del Señor debe haber preparación ,la cual no es fácil, el Salvador dijo: “ Si uno quiere venir en pos de mi, niéguese a si mismo, y tome su cruz y sígame” explico además que el hombre tome su cruz, significa que debe abstenerse de toda impiedad, y de todo deseo mundano y guardar los mandamientos del Señor. Elder Neil L. Andersen – Charla SEI, Enero 2010

Charla Fogonera SEI - Enero 2010 - Elder Neil L Andersen

Charla Fogonera SEI - Enero 2010 - Elder Neil L Andersen

VER CHARLA FOGONERA EN LINEA

A La Otra Oveja-ELDER BOYD K. PACKER

A La Otra Oveja-ELDER BOYD K. PACKER

Discurso pronunciado en una charla para doce estacas Universidad Brigham Young 5 de marzo de 1978

 

Lo que diré en esta presentación será serio y solemne. No hablaré a todos, así que pido la indulgencia de los "noventa y nueve" mientras hablo con "la otra oveja". Os pido a vosotros, los noventa y nueve, que os sentéis silenciosamente, si lo deseáis, reverentemente si podéis, y que generosamente ayudéis a crear un ambiente en el que podamos comunicarnos con aquel que tan desesperadamente necesita la ayuda que presentaré. Después de todo, la cooperación de vosotros los noventa y nueve puede ser de provecho propio, ya que puede llegar un momento en los años venideros en que podríais usar algo de ío que digo para ayudar a otra persona, quizá alguien muy cercano a vosotros.

Me invade el temor de que cualquier presentación del tema que trataré pueda ser falto de delicadeza o de recato. Me siento quizá como se sintió Jacob, el Profeta del Libro de Mormón, cuando comenzó un sermón con estas palabras:

. . .me apena tener que hablaros tan osadamente delante de vuestras esposas e hijos, muchos de los cua­les son de sentimientos sumamente tiernos, castos y delicados ante Dios, cosa que agrada a Dios. . .

Mas a pesar de la magnitud de la tarea, debo obrar según el estricto mandamiento de Dios, y hablaros de vuestras iniquidades y abominaciones, en presen­cia de los puros de corazón y de los de corazón que­brantado, y bajo la mirada del ojo penetrante del Todopoderoso Dios (Jacob 2:7, 10).

Comprendo estas palabras de Jacob como nunca antes. Veo ante mi" la juventud digna de Sión. No obstante debo tratar un tema tal como lo hizo Jacob, y por la misma razón.

Otra oración más de Jacob:"Por tanto, yo, Jacob, les hablé estas palabras, mientras les enseñaba en el templo, habiendo primeramente obtenido mi mandato del señor" (Jacob 1:17; cursivas agregadas). Tened la seguridad de que me he preparado en oración con respecto a esta asignación.

Y así, abordemos el tema. Para introducirlo debo usar una palabra, sólo la usaré una vez. Os suplico tomar nota de que lo utilizo como adjetivo, no como sujeto; lo recha­zo como nombre. Les hablo a aquellos pocos, aquellos muy pocos, que pueden estar sujetos a la tentación homo­sexual. Repito, acepto la palabra como un adjetivo que describe una condición temporal; la rechazo totalmente como un nombre que describe una condición permanente.Descargar articulo completo

Pecados, Crímenes y Expiación

Pecados, Crímenes y Expiación

Mis queridos hermanos y hermanas, estoy agradecido por esta oportunidad de hablar a los hombres y mujeres que han sido llamados para enseñar el evangelio de Jesucristo a los jóvenes en nuestras escuelas secundarias, colegios y universidades. La suya es una responsabilidad sagrada. Ustedes son los guardianes de la verdad y los beneficiarios de la confianza de sus estudiantes. Ellos los ven a ustedes como las personas encargadas de llevarles un plan de estudios sagrado. Su tarea es santa y su rendimiento es, por tanto, objeto de grandes expectativas. Sus enseñanzas son, potencialmente, las más importantes que sus estudiantes recibirán. Todos los que hemos sido llamados o asignados como profesores de religión tenemos la seria y sagrada responsabilidad de tratar de ser nosotros mismos y de hacer nuestro desempeño digno del gran mensaje que tenemos. Que Dios nos bendiga al esforzamos por hacerlo! 

Después de que Enós clamó al Señor en poderosa oración todo el día y toda la noche, una voz vino a él diciendo: “Enós, tus pecados te son perdonados, y serás bendecido” (Enos 1:5). Sabiendo que Dios no puede mentir, Enós entendió que su culpabilidad fue borrada. Entonces, hace la pregunta que provee el texto de mis observaciones: “Señor, ¿cómo se lleva esto a efecto?” (v. 7). 

Se lleva a cabo a causa de la expiación y su fe en el Redentor que ha pagado el precio (ver v. 8). Por una expiación que es milagrosa y va más allá de nuestra comprensión, el sacrificio vicario del Cordero sin mancha que satisface la justicia de Dios. De esta manera, recibimos la misericordia de Dios. 

Pero, ¿qué es la justicia? Y ¿que es la misericordia? Y ¿cómo se relacionan entre sí? Estos conceptos son fundamentales para el Evangelio de Jesucristo. Son a veces malentendidos porque se confunden fácilmente al compararlos con los conceptos que entendemos en nuestra mortal preocupación de lo que llamamos la ley penal. De hecho, nuestras ideas sobre la justicia y la misericordia y las leyes de Dios son a veces confusas por lo que sabemos acerca de la justicia penal según lo especificado por las leyes del hombre. 

Los jóvenes que ustedes enseñan son susceptibles a estos malentendidos. Por lo tanto, he optado por hablar de la justicia y la misericordia y la expiación, y sobre el arrepentimiento, confesión, y el sufrimiento. Voy a comparar y contrastar cómo se relacionan estas realidades con el contenido y la aplicación de las leyes de Dios y las leyes del hombre. Espero que les ayuden a comprender a sus alumnos estos importantes temas y aplicarlos en sus propias vidas.Descargar Articulo completo

Charla Fogonera SEI-Dieter F. Uchtdorf

Charla Fogonera SEI-Dieter F. Uchtdorf

Ver Charla Fogonera SEI

Charla Fogonera SEI : Hna. Elaine S. Dalton

Charla Fogonera SEI : Hna. Elaine S. Dalton

El pasado domingo 13 de Septiembre de 2009 se realizón la transmisión de la Charla Fogonera para los Jóvenes Adultos Solteros de la Iglesia.El mensaje fue dado por la Hermana Elaine S. Dalton, Presidenta General de las Mujeres Jóvenes de la Iglesia y fue transmitido desde el Campus de Provo de la Universidad de Brigham Young.

Ver Charla Fogonera

Charla Fogonera del SEI 03 mayo 2009 - Elder David A. Bednar

Charla Fogonera del SEI 03 mayo 2009 - Elder David A. Bednar

Ver Charla Fogonera

Charla fogonera del SEI 01 marzo del 2009 - Elder Robert D. Hales

Charla fogonera del SEI 01 marzo del 2009 - Elder Robert D. Hales

   Ver Charla Fogonera

Charla fogonera del SEI 11 de Enero 2009 - Pdte. Thomas S. Monson

Charla fogonera del SEI 11 de Enero 2009 - Pdte. Thomas S. Monson

VER CHARLA FOGONERA SEI ENERO 11 - THOMAS S. MONSON